El asteroide 2003 YT1 nos tiró un cascote del tamaño de una uva.
El 28 de abril del 2017, se observó una estrella fugaz sobre Japón la que pudo ser registrada por 12 de las 20 cámaras de la red de observación SonotaCo.
Los registros permitieron analizar su trayectoria y procedencia y estimar su órbita previa al ingreso a nuestra atmósfera. La misma coincidió muy bien con la del asteroide 2003 YT1.
Este asteroide tiene una órbita que lo acerca a Nosotros a una distancia algo menor que la de la Luna, con un diámetro de 1 a casi 2 Kms. Por ese motivo está catalogado como potencialmente peligroso aunque no hay significativas probabilidades de que nos impacte; tan sólo hay un 6% de chances de que lo haga en los próximos 10 millones de años.
Analizando el brillo que mostró el meteoroide (pequeño asteroide con un tamaño inferior a los 50 mts.) al entrar en la atmósfera y suponiendo que era rocoso, se calculó que tenía un tamaño de casi 3 cm. y un peso de unos 30 grs.
Hay varias explicaciones de cómo se desprendió de su cuerpo principal.
1. Pudo estar “reposando” en la superficie del asteroide hasta que por algún motivo fue expulsado.
2. Se pudo producir un impacto en la superficie del asteroide que generó y expulsó una fractura.
3. El asteroide pudo aumentar su rotación y expulsó esta piedra (entre otras) que terminó cayéndonos luego de llevar una órbita similar a la del cuerpo principal.
En este aspecto, el aumento de rotación puede deberse al efecto YORP que muestran otros asteroides. Este efecto se debe a la luz solar.
Bajo la influencia de la radiación del Sol, un objeto puede alterar su órbita. La cara donde es de día absorbe calor y cuando gira, en las partes donde “anochece” comienza la radiación de ese calor al exterior (se enfría) y eso, a largo plazo, modifica su trayectoria. Puede escapar si gira en el mismo sentido en que orbita y puede decaer si lo hace en sentido contrario (retrógrado). A esto se lo conoce como efecto Yarkovsky. Pero además, si la superficie del asteroide muestra diferentes características en la reflexión de la luz, puede adquirir más rotación, ese es el efecto YORP.
Ese ese aumento de giro, puede expulsar material. Parte éste puede alejarse y parte puede quedar orbitando el asteroide formando un anillo en el que pueden formarse lunas.
Referencia:
- TRACING A BRIGHT FIREBALL BACK TO ITS PARENT: THE POTENTIALLY HAZARDOUS ASTEROID 2003 YT1 | P. Plait | https://www.syfy.com/syfywire/tracing-a-bright-fireball-back-to-its-parent-the-potentially-hazardous-asteroid-2003-yt1
Fuente:
- A FIREBALL AND POTENTIALLY HAZARDOUS BINARY NEAR-EARTH ASTEROID (164121) 2003 YT1 | Toshihiro Kasuga et al | https://arxiv.org/pdf/1910.06527.pdf
pdp.